Se acaba el verano y con ello algunas de las localidades de la provincia cierran los momentos de mayor intensidad cultural, ante el incremento del número de vecinos coincidiendo con el estío y el calor estival. Es también el caso de Villálvaro, una pedanía de San Esteban de Gormaz, que demuestra, un año más, que se trata de un pueblo muy vivo y no solo en verano, porque aunque con el final de agosto han cerrado su programa estival, lo cierto es que durante todo el año la asociación Virgen de las Lagunas coordina un amplio programa cultural en el que hay citas religiosas, musicales, gastronómicas o enológicas, entre otras.
Pero lo cierto es que el teatro es, desde hace años, su buque insignia, convirtiéndose en un referente único para hacer que grandes y mayores suban al escenario, pierdan el miedo escénico y el resto del pueblo pueda disfrutar, al menos en verano y Navidad, de la cultura teatral.
Este año las obras de teatro han sido tres, en función de las edades de los actores, para los más pequeños la representación fue El palacio de la felicidad, en el caso de los medianos fue Una noche de primavera sin sueño y finalizaron con los más mayores, que pusieron en escena la obra Ojo por ojo, gato por liebre.
La asociación Virgen de las Lagunas es la encargada de coordinar los ensayos, elegir las obras, dirigir a los actos, preparar los escenarios y decoración, ayudar a los actores y controlar que cuando se sube el telón el éxito en la localidad de Villálvaro esté completamente garantizado, tras semanas de esfuerzo y dedicación.
La asociación Virgen de las Lagunas de Villálvaro es un ejemplo vivo y dinámico de que en el mundo rural se pueden hacer muchas cosas y quizás el teatro en uno de las artes en las que más han destacado, sin olvidar que cuentan con una numerosa charanga llena de componentes hijos del pueblo.
La historia de su pasión teatral surgió hace años de la mano del CEAS Ribera del Duero y han sabido seguir invirtiendo en formación, tiempo, cultura y generar una cantera de actores que puedan mantener vivo este patrimonio artístico.
Ha sido clave la inversión en arte teatral de Villálvaro, que han seguido apostando por los más pequeños y que, como hijos e incluso nietos del pueblo que siguen vinculados a la localidad familiar y no dudan en acudir a ensayos y representaciones, asumen la importancia de pasar el testigo generacional y hacer del pueblo un motivo de orgullo, porque forma parte de sus raíces.
Además, como en cada representación teatral siempre consiguen un lleno total como han demostrado con las obras teatrales este verano en la calle, aprovechando las horas de menor calor.
No ha sido la única actividad organizada este verano por los vecinos de Villálvaro que siempre demuestran su dinamismo, porque en este mes de agosto también han llevado a cabo una ruta en bici organizada por el club de ciclismo MTB Villálvaro, con un éxito de participantes. Las peñas también tienen un gran protagonismo como demostraron con la celebración de la prefiesta de San Mamés o cerrar el mes con la caminata nocturna que permite recorrer camino cercanos con la caída del sol, en otra de esas citas que ya figuran anotadas en el calendario cultural.