Hilario Carazo Romero se proclamó el domingo ganador del concurso de vino artesanal que organiza la asociación Virgen de las Lagunas de Villálvaro al que se presentaron 15 vecinos de la localidad que demostraron sus buenas dotes en la elaboración de tintos en la Ribera del Duero soriana, imponiéndose a Anastasio Romero Romero, que obtuvo el segundo premio, y Eloy Pascual Lucas, que consiguió el tercer puesto.
Como explicó la presidenta de la asociación Ludi Navas, el concurso estuvo dirigido por el enólogo Jerónimo Contreras, de Bodegas Castillejo, quien repartió el vino y las fichas de cata, para seleccionar primero los cinco mejores y después los ganadores de este concurso que volvió después de dos años de suspensión por la pandemia, poniendo en valor “nuestras viñas, nuestras cepas y nuestros vinos”.
El concurso estuvo compuesto por diferentes vecinos de la localidad y también por miembros de la asociación de catas de Soria, la ruta del Vino Ribera del Duero, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen, las asociaciones Amigos de las bodegas y el castillo, Viñas Viejas de Soria, Diputación Provincial y Junta de Castilla y León.
Enrique Pascual, presidente del Consejo Regulador, se mostró satisfecho de volver a repetir esta cita después de dos años y volverse a encontrar con viejos amigos y reconoció que estos vinos artesanales reflejan el alma de la Ribera del Duero que es “alegría y diversión” en la elaboración de estos caldos. Además también destacó el buen nivel que atraviesa la Ribera, que ha superado en ventas a Rioja, lo que supone “estar contentos y de enhorabuena” y confió en poder seguir celebrando buenos datos.
También estuvo presente Miguel Ángel Gayubo, presidente de la Ruta del vino, quien puso en valor este tipo de concursos para mantener vivas las tradiciones en la Ribera, “estos vinos es el inicio, es la tradición, que conserva la tradición que tanto vendemos”, aseguró, reconociendo que suponen un valor añadido al territorio. De hecho que un turista conozca una territorio a través de sus propios vecinos, que les abren sus bodegas, admiran mucho más esta tierra. Por otro lado reconoció que cada vez el nivel de elaboración es mejor y se va perfeccionando el vino que elaboran de manera artesanal.